El joven emigrante cubano Richar Fernández, fue acusado el pasado 10 de enero de un grave delito de violación y robo a una ciudadana checa. El acto en sí ocurrió en agosto pasado en una de las discotecas del distrito de Hradec Králové, República Checa. Ahora el acusado estará bajo custodia en la corte.
Richar Fernández, cubano acusado de violación y robo / Foto de Facebook |
El atacante, de acuerdo con la información recopilada, se comportó de manera agresiva, e incluso, la víctima manifestó signos de estrangulación, dijo el portavoz de la policía del condado, Ene Čížkovský.
Argumentaron que la víctima, además de hematomas físicos, tuvo un trauma mental debido a la terrible experiencia. Se aseguró también que Fernández, mientras escapaba del lugar, le violentó un teléfono móvil valorado en miles de coronas checas.
Dijeron que la víctima nunca antes había visto al ofensor, y que no había estado en contacto con él dentro de la discoteca. Tampoco se aseguró si el acusado la seleccionó previamente o por accidente. La policía no quiso dar más detalles.
No compartiremos los detalles en este momento. La investigación continúa, dijo el portavoz.
La víctima proporcionó a los investigadores una descripción y pruebas sobre la base de la cual pudieron rastrear al perpetrador. Su identificación ha sido confirmada por expertos en ADN. Además, encontraron el teléfono robado en sus pertenencias.
Richar corre el riesgo de permanecer hasta 12 años tras las rejas
El Tribunal de Distrito en Hradec Králové culpa de violación y robo. Si la acusación también se demuestra en la corte, Richar corre el riesgo de permanecer hasta 12 años tras las rejas.
El habanero permanecía en República Checa, antes de su arresto, como emigrante cubano solicitante de Protección Internacional que sería dictado por el Departamento de Policía de Asilo e Inmigración de ese país. Si se ratifican los cargos imputados, después de cumplir su condena, será deportado a Cuba.
Muchos cubanos andan como loco y sin ideas apropiadas. No justifico el hecho, pero si conocemos bien las circunstancias sabriamos que en esta historia hay muchos otros culpables.
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