¿Se merece el régimen cubano el Premio Nobel de la Paz?

Los médicos caribeños merecen el premio por ayudar a combatir la pandemia de coronavirus, Italia ha estado hablando desde la primavera. 

Y se suman otros seguidores de esta idea, como la reconocida escritora chilena Diamela Eltitová o el director estadounidense Oliver Stone. Después del estallido de la crisis, La Habana envió varios miles de médicos y enfermeras a los países afectados. Se unieron a otros 30.000 profesionales de la salud desplegados en todo el mundo anteriormente.

Pero será la política y los negocios más que el altruismo lo que lleve al régimen a formar las llamadas Brigadas Henry Reev, equipos médicos extranjeros especiales. La exportación de profesionales de la salud es la mayor fuente de ingresos de Cuba, superando al turismo y todas las exportaciones de bienes como ron o puros. 

Para que os hagáis una idea, en 2018 estos servicios le aportaron a la isla casi $ 8.000 millones, el doble que el turismo y cerca de tres veces más que todas las exportaciones de bienes.  

¿Doctores como esclavos?

Cuba ofrece servicios médicos a unos 70 países. Algunos por dinero, otros, en su mayoría los más pobres, por apoyo político. La mayor fuente de ingresos para ella es Venezuela, donde envía alrededor del 90 por ciento de los profesionales de la salud. 

El convenio de cooperación se creó en los días dorados de Caracas al inicio del milenio. Los entonces dirigentes Fidel Castro y Hugo Chávez acordaron canjear médicos por petróleo.

Y debido a que eran principalmente aliados políticos, Venezuela se comprometió a pagar enormes sumas de dinero a la isla devastada bajo el régimen comunista. Caracas pagó por los servicios cuatro veces más que el segundo mayor arrendador de médicos cubanos, Brasil. 

Sin embargo, recientemente dejó de cooperar con Cuba y envió a los médicos de regreso. Como Bolivia. Por cierto, según el actual gobierno boliviano, los cubanos también les enviaron espías con batas médicas. Sin embargo, el régimen establecido por Chávez también ha diezmado a la rica Venezuela, por lo que el personal médico apenas puede pagar. Cuba necesariamente está mirando hacia otro lado. Y por eso, un premio Nobel de este tipo sería sin duda un buen anuncio.

Este es realmente un proyecto muy controvertido. Los médicos tienen que pagar la mayor parte de su salario al gobierno cubano, la participación en la misión difícilmente puede ser rechazada y el régimen los vigila de cerca a través de las fronteras.

"Cuba está aplicando reglas draconianas al personal médico de todo el mundo, violando sus derechos fundamentales, incluida la libertad de expresión, asociación y movimiento", dijo Human Rights Watch, una organización sin fines de lucro que publica el creciente número de médicos debido a la pandemia. 

La organización sin fines de lucro ha pedido a los gobiernos de los países que han recibido atención médica que apelen a un régimen que algunos dicen que contratan a sus médicos como esclavos. 

Pocos negarían el precio a un médico dedicado que lucha contra un covid. Pero, ¿realmente queremos apreciar el régimen autoritario que lo vende por dólares en nombre del internacionalismo?